TESTIMONOS JMJ. II

¡¡¡¡GRACIAS!!!!

Transcurridos los días vividos y compartidos en Madrid retomo cada jornada, cada momento, cada detalle y sólo me sale la palabra ¡gracias!.

Llevábamos tiempo embarcados en esta faena a la que nos convocó el Señor y llegaron los días de materializar lo que con tantas ganas anhelábamos.

Desde el momento en el que me uní a vosotros me sentí acogida, querida, sentí la Iglesia vibrar a mi alrededor y poco a poco se fue haciendo realidad en el encuentro, en el trabajo, en el detalle de cada jornada.

¡ Si, si, si, nos vamos a Madrid!. Gritábamos en Criptana y una vez en marcha hacia Madrid me preguntaba ¿Qué nos espera?¿Cómo será? Y a la vez me repetía: “Adora y confía” pues el Señor de la vida y de la historia nos lo irá dando.

Ha sido un gozo grande compartir el techo, el suelo, la ducha, la sonrisa , los buenos días y hasta alguna lágrima porque íbamos todos a encontrarnos con el Pastor de la Iglesia que convocaba y tenía mensajes para nosotros.

Agradecida me siento hacia la parroquia, hacia Pablo y el grupo de sacerdotes con los que hemos convivido en estos días.

Llena de alegría por haber convivído con jóvenes, con mis hermanas en la consagración Covadonga y Magdalena , con familias… pues en todos ellos la cercanía y el gozo eran palpables.

Me he sentido hermana y compañera de camino. Y no tanto por haber estado más atenta a un grupo encantador sino porque en el rezo, en la catequesis, en las caminatas, en cada minuto del vivir diario sentía que vibraba en mí una alegría especial que me hacía repetir el lema “arraigados y edificados en Cristo…” y así ¿Qué puedo temer? ¿Qué puedo pedir?.

Ni el calor, ni el cansancio, ni el momento más duro de Cuatrocientos ha sido capaz de apagar en mí el gozo y la fortaleza con la que he regresado.

Los jóvenes me habéis evangelizado, me habéis ayudado a seguir “firme en la fe” porque cada paso que dábamos era ejemplo de civismo, de encuentro, de búsqueda…

Podíais haber optado esa semana por otra cosa y optasteis por esta gran fiesta de fe.

¡Gracias por dejaros acompañar! ¡Gracias por pedirnos más!.

Con cariño,

Sor Isabel Vique(Sori), RELIGIOSA TEATINA